Es una respuesta natural de nuestro cuerpo ante situaciones de peligro y que nos ayuda a movilizar los recursos necesarios para responder de la mejor manera posible. Sin embargo, cuando dicha situación se alarga en el tiempo y esa respuesta de ansiedad es excesiva y desproporcionada en relación con la situación puede convertirse en un problema e interferir en todas las áreas de nuestra vida.
¿Cuáles son los síntomas de la ansiedad?
- Preocupación constante y excesiva
- Nerviosismo
- Agitación
- Pérdida de atención
- Dificultad para concentrarse
- Tensión muscular
- Sudoración excesiva
- Problemas gastrointestinales
Tipos de problemáticas dentro de la ansiedad
Trastorno de ansiedad generalizada
Preocupación excesiva y persistente sobre una variedad de situaciones.
Trastorno de pánico
Episodios repentinos e intensos de miedo extremo o incomodidad, conocidos como ataques de pánico. Pueden ir acompañados de palpitaciones, sudoraciones, temblores y sensación de muerte inminente.
Fobia social
Temor intenso a situaciones sociales o de desempeño debido al miedo o a la crítica de los demás, puede provocar la evitación de situaciones sociales
Ansiedad por separación
Relacionada con la separación de figuras de apego, como padres o cuidadores que puede manifestarse con angustia al separarse y temor a la perdida.
Ansiedad por enfermedad
Preocupación excesiva por tener una enfermedad grave, a pesar de la falta de evidencia médica.
Ansiedad específica
Miedo intenso y persistente a objetos, situaciones o actividades específicas como volar, animales etc.
Trastorno de estrés postraumático
Desarrollo de síntomas después de experimentar, presenciar o escuchar un evento traumático como flashbacks, pesadillas, hipervigilancia y evitación de estímulos relacionados con el trauma.